Los narradores en nuestra historia



Últimamente he recibido muchos mensajes preguntando por el tipo de narrador más conveniente a una historia, y cuales son en realidad los tipos de narradores que existen. Así que voy a intentar aportar un poco de teoría sobre los tipos de narradores de una forma sencilla y lo más llana y directa posible.

Existen varios tipos de narradores, próximamente publicaré un artículo de teoría pura y dura sobre este tema, pero no en esta ocasión. Hoy, me he planteado intentar que lo entendáis de una forma muy simple:

Hazte las siguientes preguntas:

¿Cuánto sabe el narrador de la historia que nos está contando? Este punto nos dirá si el narrador conoce los sentimientos e intenciones de los personajes o si simplemente narra la historia como la grabaría una cámara cinematográfica, donde lo que sienten y piensan los personajes únicamente se intuye de su comportamiento.

¿Observa la historia desde dentro o desde fuera? Aquí se nos indica si el narrador ha vivido la historia, ya sea como protagonista o testigo; si simplemente repite lo que le han contado, o si se trata de un narrador totalmente ajeno a la historia, aunque la conoce.

De estas dos consideraciones surgen todos los narradores identificados por la teoría, desde el narrador protagonista, que cuenta su historia desde su propio punto de vista, hasta el más común de todos: el narrador omnisciente, que es el que conoce no sólo toda la historia sino también los sentimientos y pensamientos de todos los personajes; pasando por el narrador testigo, que suele conocer gran parte de la historia pero no las motivaciones íntimas de los personajes.


Narrador en primera persona:

Es el narrador que cuenta la historia directamente, y que generalmente, forma parte de la misma. Lo más usual, es que este narrador sea el protagonista, o en su defecto, alguien cercano al protagonista que nos cuenta sus aventuras.
Como ejemplo de narrador que nos cuenta las aventuras del protagonista, viviéndolas con él, tenemos las aventuras de Sherlock Holmes, donde el narrador encargado de contarnos la historia es Watson:


"Para Sherlock Holmes, ella es siempre la mujer. Rara vez le oí mencionarla de otro modo. A sus ojos, ella eclipsa y domina a todo su sexo. Y no es que sintiera por Irene Adler nada parecido al amor. Todas las emociones, y en especial ésa, resultaban abominables para su inteligencia fría y precisa pero admirablemente equilibrada. Siempre lo he tenido por la máquina de observar y razonar más perfecta que ha conocido el
mundo; pero como amante no habría sabido qué hacer. Jamás hablaba de las pasiones más tiernas, si no era con desprecio y sarcasmo."

Sherlock Holmes es el protagonista, pero su amigo y compañero Watson es el encargado de narrar la historia.

El narrador en primera persona, puede participar de los hechos, o narrarlos de forma autómata. ¿Y cómo sé lo que debo hacer? ¿Cómo elijo entre estas dos formas? Bueno, no es necesario elegir, habrá partes del texto que tu protagonista narrará de una determinada forma, y partes en las que la narración cambie, según cómo le afecten a nivel emocional los hechos.

¿Cual es el truco?

Pues sencillo: Para que tu narrador se haga participe de los hechos, debes insertar sus emociones ante lo que está contando, ya que narra algo que le está sucediendo directamente, o que le afecta a nivel emocional. Si los hechos no le están sucediendo directamente, o no le afecta demasiado a nivel emocional, no debes insertar demasiados sentimientos ni pensamientos.

Para que lo veáis más claro, os pondré unos ejemplos:

Narrador en primera persona como observador: No participa en ella, sólo la cuenta como un observador, como si la estuviera viendo:

"Lo he leído en el periódico y también lo estoy viendo ahora mismo en la televisión. Pero yo he sido testigo directo de la barbaridad que una mujer ha cometido con su perro. Estaba asomado a la ventana cuando la vi llegar, casi arrastrando al chucho, hasta dejarlo colocado en la mediana de la autopista. El perro estaba tan desconcertado como yo, ninguno de los dos supimos qué hacer. ¡Por Dios, que alguien haga algo! Y mi deseo se cumplió. Alguien llegó, cogió al perro y denunció a la desalmada. ¡Respiré aliviado!"

Narrador participante: Los hechos le ocurren directamente, le están sucediendo cosas. Expresaremos pensamientos y sentimientos para enfatizarlo más:


"Estoy muy nervioso porque hoy mi dueña me sacará de casa sin mi correa. Estamos bajando las escaleras y me parece que vamos a ir al parque, pero ¡qué sorpresa! Vamos en otra dirección.
Acabamos de llegar a un prado y delante hay una autopista.
Pero… ¿qué hace mi dueña? Me ha dejado en medio de la autopista ¡Qué horror! ¡Y viene un coche a toda velocidad!
¿Quién me ha cogido? ¡Oh!, es un chico que tiene muy buena pinta, me iré con él y estoy seguro que esa mujer pagará lo que me ha hecho."

Narrador en tercera persona:
Es el otro tipo de narrador más común. Una tercera persona, nos cuenta la historia. El narrador está fuera de la acción.

Ahora bien, existen varios tipos de narradores en tercera persona. Aunque no vamos a entrar a explicarlos técnicamente, sí que os daré dos putas para desarrollarlo en un sentido u otro, para ello, hazte esta pregunta:

¿El narrador sabe lo que piensan y sienten los personajes?
Si la respuesta es NO, estaremos ante un narrador que no va a expresar sentimientos ni pensamientos de los personajes. Los dejará a la intuición del lector según el comportamiento de estos.
Si la respuesta es SÍ, estaremos ante un narrador que se mete en la cabeza de los protagonistas y expresa sus sentimientos.
Por ejemplo: 
"La luz que bañaba la habitación pintaba las paredes de un color anaranjado, Paula se detuvo en el centro de la sala, observando todo lo que le rodeaba. Encontró lo que estaba buscando: una fotografía colgada de la pared. Acarició con la punta de los dedos el marco de la imagen; dos lágrimas recorrieron sus mejillas.
Paula es la protagonista de la escena, pero no es la persona que narra los hechos; además, el narrador no expresa sus sentimientos, aunque podemos imaginar que la foto tenía un valor sentimental para ella.
"La luz que bañaba la habitación pintaba las paredes de un color anaranjado, Paula se detuvo en el centro de la sala, observando todo lo que le rodeaba. La nostalgia de volver a aquel lugar le oprimía el pecho. Encontró lo que estaba buscando: una fotografía colgada de la pared. Acarició con la punta de los dedos el marco de la imagen. Recordaba a sus padres sentados en el sofá, sonriendo mientras ella correteaba por el salón; intentó controlarse, pero la congoja que se había instalado en su pecho ganó la batalla; dos lágrimas recorrieron sus mejillas.
En este fragmento, el narrador se mete en la cabeza de Paula, mostrándonos sus sentimientos.
Existe otro tipo de narrador, que sería el narrador en segunda persona, aunque raramente es usado, por lo que no vamos a profundizar en él. En el artículo de teoría sobre narradores lo explicaremos.
¿Pueden aparecer en mi historia varios tipos de narradores?
Por supuesto que sí. Es lo que se denomina cambios de punto de vista. Puedes narrar una misma escena desde varios puntos de vista, enriqueciéndola. Aunque debes tener la precaución de que el lector sepa quien habla en cada momento, o se sentirá perdido y tu obra perderá mucho valor.
No cambies de punto de vista como norma, limitalo a determinadas escenas, pocas, pero no lo tomes como una norma a lo largo del relato. Cuando lo hagas, deja muy claro quien está narrando, pero hazlo de forma sutil, que el lector lo entienda por lo que sucede a su alrededor.  
Ahora ya tienes tus narradores, conoces como funcionan, así que vamos a proponerte una idea para un relato, y que practiques esta técnica:
"Dos chicos entran a robar en casa de alguien. Piensan que el dueño de la vivienda no está en casa así que rompen una ventana y se cuelan dentro.
Resulta que el dueño de la casa está un poco loco. Se da cuenta de que han entrado a robar y se dispone a coger a los ladrones.
Los captura, apuntándoles con un arma. Pero no llama a la policía, los encadena y los encierra en dos habitaciones contiguas.
Al cabo de unas horas, entra en la habitación de uno de ellos y lo mata.
El otro ladrón, que lo ha odio todo, sabe que pronto hará lo mismo con él."
Una trama fácil, pero vamos a darle mayor vida cambiando los puntos de vista de la siguiente forma:
Dos chicos entran a robar en casa de alguien. Piensan que el dueño de la vivienda no está en casa así que rompen una ventana y se cuelan dentro. LO NARRAREMOS DESDE EL PUNTO DE VISTA DEL CHICO A (UNO DE ELLOS, EL QUE SEA)
Resulta que el dueño de la casa está un poco loco. Se da cuenta de que han entrado a robar y se dispone a coger a los ladrones. USAREMOS UN NARRADOR EN TERCERA PERSONA.
Los captura, apuntándoles con un arma. Pero no llama a la policía, los encadena y los encierra en dos habitaciones contiguas. USAREMOS PARA ESTA ESCENA DE NUEVO AL CHICO A
Al cabo de unas horas, entra en la habitación de uno de ellos y lo mata. ESTA ESCENA LA NARRARÁ EL CHICO B (ES DECIR, NUESTRO ASESINO MATA AL CHICO A)
El otro ladrón, que lo ha odio todo, sabe que pronto hará lo mismo con él. USAREMOS DE NUEVO UNA NARRACIÓN EN TERCERA PERSONA.
Ahora coge papel y lápiz y monta tu relato.













    

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